viernes, 23 de julio de 2010

¿LOS CABALLEROS LAS PREFIEREN BRUTAS… O MÁS BIEN LAS PREFIEREN BOBAS?

Este es un tema polémico, por esa razón lo he querido tocar a mi estilo… Para esto se debe definir el concepto de lo que es “BRUTA”… Aquí me ayudaron algunos de mis amigos cibernautas… Solo expondré algunos de esos conceptos, esto no quiere decir ni que estoy de acuerdo con ellos, o que no me gusten, simplemente, me llamaron la atención. Uno de mis amigos me dijo: “Mujer Bruta: dícese de mujer que no piensa antes de hablar, que toca explicarle todo lo que se dice, y todos los chistes que uno dice, que se ríe cuando ya no hay chiste y usualmente es más bonita que la media… muy rara vez una mujer bonita es inteligente y muy rara vez una mujer inteligente es bonita salvos algunos lugares”… otro me dijo: “una mujer bruta, en mis palabras, es una mujer ignorante que no sabe ni donde esta parada, no sabe absolutamente nada, es una cabeza hueca, en su cabeza tiene aserrín, solo habitan los piojos porque no tiene materia gris”… otro me dijo: “una mujer bruta es la que se deja llevar por la corriente de lo que diga el hombre hace todo lo que él diga, come lo que él diga ve lo que él diga, y no cuestiona nada de lo que él diga”... otro me dijo: “mujer bruta es aquella mujer que cumple dos características: la primera no sabe lo que quiere en la vida, la segunda, cree saber lo que es obvio pero se descacha”

Desde mi punto de vista muchos hombres no todos, han asociado el término “BRUTA” con la falta de conocimiento respecto a temas determinados… Por ejemplo, “Bruta” es aquella que no sabe de matemáticas, ciencias, etc., o también son aquellas mujeres que no saben expresarse, que aparentemente no tiene un norte definido, que parecen veletas, que se dejan llevar… y que por lo general son bonitas. Son brutas entonces esas modelos que no saben contestar preguntas, que no han ido a una universidad, huecas, que solo tienen un cuerpo bonito. Pero si nos podemos a analizar la vida de estas modelos, vemos que es exitosa, bueno, desde mi punto de vista claro está. Son dueñas de perfumerías, marcas de ropa, boutiques, y todo lo imaginable… ¿acaso para eso, para montar y sostener esas empresas que estas mujeres tienen no se necesita algo más que dinero?, para mí esa capacidad que se debe tener va muy de la mano con la inteligencia, y no tanto con el conocimiento que se pueda adquirir en una universidad, claro que este ayuda, y mucho, pero no es indispensable. ¿Comprobado? ¿Entonces qué es ser Bruta?, ¿acaso aquellas mujeres “bonitas”, que aparentan ser tontas y que no tienen nada en la cabeza y se “marranean” (aprovechan), de los hombres en muchos sentidos? Acaso mis queridos hombres para “marraneárselos a ustedes” ¿no se necesita inteligencia?... “esas mal llamadas brutas dijo una amiga mía, son mucho más inteligentes, pues con su nadadito de perro consiguen todo lo que quieren”.

Ahora quiero dar mi concepto de lo que para mí es una mujer bruta, “Es una mujer que aunque puede tener muchas cosas en su cabeza, en otras palabras, tener gran conocimiento, una inteligencia envidiable, éxito a nivel profesional, se deja llevar por otros, ya sean hombres o mujeres, no tiene criterio propio, necesita siempre la aprobación de otros, y tiene una autoestima nivel cero… Pero existen desafortunadamente mujeres REBRUTAS, son aquellas que dejan que pongan su dignidad por el suelo, las maltraten física sexual y sicológicamente y no se valoran como lo que son, MUJERES. Son aquellas que están con un hombre por compasión, por conveniencia, buscando más estabilidad que amor y su vida se vuelve un caos, aquellas que permiten que se les vulnere su integridad y no se ven triunfadoras. Y más que BRUTAS son BOBAS.

Aunque tengo otro concepto de “BRUTA”, me lo dio otro amigo, y con esto sí puedo afirmar que “Los Caballeros SIIIII Las Prefieren Brutas”. “BRUTA: Mujer de pechos grandes”. ¿A que un 99.9% las prefiere brutas? jejeje.

Ya hablando en serio y no de pechos grandes, ¿De verdad las prefieren brutas?... Y ¿Qué estrategias tenemos las mujeres para no ser BRUTAS?

Espero comentarios…

miércoles, 7 de julio de 2010

¿REALMENTE SOMOS QUIENES DECIMOS SER?

Alguien hace mucho tiempo me decía: “todos los seres humanos sin excepción alguna usamos una máscara”… Es difícil admitirlo, pero creo que ninguno de ustedes puede decir que lo que acabo de decir no es cierto. Y no necesariamente quiere decir que seamos mentirosos, aunque las máscaras esconden verdades… Quiero hablar hoy de los pro y los contra de usar “un disfraz” frente a los demás.
Muchas veces me he preguntado, ¿porque es necesario sonreír cuando estoy destrozada por dentro?... y debe confesar que lo he hecho muchas de veces, aunque la verdad no soy muy ágil para disimular mis sentimientos…
Me atrevo a decir que más que una máscara el ser humano oculta ciertos aspectos de su vida que no quiere que los otros conozcan por diferentes aspectos, pero más que enumerar porque esconder ciertas cosas de nuestra vida se puede encerrar en una sola frase: “QUERER DARLE LA TALLA A LOS DEMÁS”… y muchos dirán, “no es cierto, pues no me importa lo que piensen los demás”… ¿seguro?... quizás, pero ese darle “LA TALLA A LOS DEMÁS”, encierra muchísimos otros aspectos, fuera de ese que dirán. Orgullo, porque no quiero que conozcan mis debilidades, o los aspectos oscuros de mi vida, el querer ser más que los demás, porque así digamos que no, siempre queremos sobresalir, esa es nuestra necesidad de poder, que queramos o no todos tenemos, por ende mostrarnos todo poderosos…
Entonces… ¿Qué hacer?, porque lo ideal sería que nos mostráramos como realmente somos ¿no?, creo que si todos nos mostráramos tal y como somos el mundo no sería el mismo, quizás existirían más fracasados, más tristes, más seres frustrados… para mi es una verdadera paradoja…
No sé realmente si me estoy haciendo entender, quiero aclarar no quiero decir que los seres humanos seamos mentirosos, simplemente estoy diciendo, que por mero mecanismo de defensa “es necesario”, ocultar ciertos aspectos de nuestra vida y de nuestra manera de ser, para no ser atropellados por otros…
Pero mi pregunta después de esta reflexión es: “¿QUÉ TAN NECESARIO, QUÉ TAN PRUDENTE, QUE TAN SINCERO, Y QUE TANTO NOS DA ESE AFÁN DE QUERERLE DAR LA TALLA A LOS DEMÁS?... SABIENDO QUE AL FINAL ASÍ QUERAMOS NO SOMOS NOSOTROS MISMOS”